Si deseas comprar una camilla versátil, automática, adaptable a cada tratamiento, tienes que adquirir la camilla eléctrica. Este tipo de camillas pueden ser de dos o tres cuerpos ya eso dependerá del objetivo a que quieras destinarla.
También existen las camillas eléctricas de dos cuerpos tijera, la de articulación central, y el sillón eléctrico.
Las camillas eléctricas son aquellas que permiten el ajuste de su altura cuyo mecanismo es eléctrico. Estas se diferencian de las hidráulicas porque necesitan de alimentación (electricidad), y un mayor mantenimiento, ya que posee sensores y motor que la hacen funcionar, lo cual requiere de un engrase o limpieza cada cierto tiempo. El mando para ajustar la altura de la camilla puede ser de pie o de mano.
Los esteticistas usan la camilla eléctrica dos cuerpos tijera, ya que sus características la convierten en el instrumento ideal para el tipo de tratamientos, permitiendo elevar el respaldo a 85 grados. La altura se regula mediante el mando de la mano, siendo más práctico para el profesional.
La principal característica de las camillas eléctricas es que se puede ajustar su altura de acuerdo al profesional, al cliente y al tratamiento, muchas veces de forma precisa y sencilla gracias al sistema eléctrico. En este caso deberás considerar las normativas de seguridad que te ofrecen y si se adaptan al sitio (país) donde será ubicada la camilla, ya que las normativas cambian entre los continentes.
En algunos términos, las camillas eléctricas son más duraderas, estables y menos ruidosas; permitiendo en muchos casos, que sea una estructura adaptable a diferentes tratamientos.
Siempre es primordial al momento de elegir y comprar una camilla, evaluar el sistema de limpieza, por ello debes revisar los materiales de fabricación, que sean aquellos que te permitan y faciliten la higiene correcta de esta herramienta.
Al momento, de comprar una camilla, será determinante la calidad y precio; es importante saber que las camillas eléctricas no son de las más económicas, su sistema eléctrico las encarece, y a su vez las hace más atractivas por el sistema y beneficios que ofrece. Si tiene la oportunidad de adquirir una camilla eléctrica no dudes en hacerlo.
Esther R.