Blog

Equilibrar las energías y los espacios con lámparas de sal

Las lámparas de sal son ideales para absorber cualquier bacteria, alérgenos, virus, vapor de agua y contaminantes; cualquier agente es atraído por ella y se concentra allí sin poder salir nuevamente al ambiente.

Funcionan como retenedores de pensamientos negativos o malas energías en el entorno, por eso, normalmente son ubicadas en espacios con energías pesadas u oscuros, son usadas como decoración o un agente de limpieza energético, pero no deben ser colocadas en lugares con una humedad superior al 60 por ciento porque la misma puede dañarse.

Las lámparas de sal son beneficiosas y contribuyen a la salud y al entorno del ser humano. También son utilizadas para mejorar problemas de la piel, o cuando hay reumatismo o enfermedades de tiroides.

Las piedras de sal tienen propiedades como el yodo y otros oligoelementos del mar que permiten, regular, mantener, eliminar y prevenir diferentes afecciones del organismo, activando los agentes positivos en nuestro cuerpo. Las mismas son convertidas en forma artesanal en lámparas y normalmente son de color rosado y proyectan una luz relajante y suave, que permite conciliar el sueño, reducir el estrés, la fatiga y el cansancio.

Las lámparas de sal se conocen por ayudar a mantener el equilibrio cardíaco, aumentar la concentración y mejorar los problemas respiratorios y las alergias existentes. La proyección que tienen las lámparas de sal permite reforzar el sistema inmunológico, la respiración, la digestión, hasta la circulación sanguínea.

Estas lámparas pueden contener en su interior una bombilla, vela o una lamparita más pequeña que produzca la luz y sea proyectada. Pueden ser de diferentes tamaños y formas, para cualquier gusto o necesidad.

En Salutatis.com pueden encontrar a la venta a través de su tienda online lámparas de sal, así como diferentes artículos para las terapias naturales.

Si tienes una lámpara de sal, recuerda que debes apagarla cada cierto tiempo y limpiarla con un paño húmedo al momento de enfriarse.

Esther R.

Deja una respuesta